El sol es sinónimo de luz, energía y esperanza, pero también es sinónimo de arrugas, manchas, envejecimiento prematuro y cáncer si no se le tiene el cuidado y el respeto que se merece.

Al acercarse los días de vacaciones, tendemos a disfrutar de lugares con una mayor exposición solar y temperaturas extremas, olvidándonos muy frecuentemente de cuidar nuestra piel y darle el mantenimiento necesario para que no se vea dañada por el sol. Veamos algunos consejos básicos para conservar una piel joven y saludable durante este período y evitar regresar con problemas de quemaduras, envejecimiento o manchas.

1. Lo primordial y más importante es el uso frecuente de protector solar para toda la piel. Es recomendable optar por un protector facial que cuide esa piel más delicada y, por otro lado, un protector corporal para el resto del cuerpo. Se recomienda aplicar 30 minutos antes de la exposición al sol y repetir cada dos horas, poniendo especial atención en cara, cuello, escote y manos.

2. Evita exponerte al sol en las horas más dañinas. La principal acción de los rayos ultravioleta es entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde, horario en el cual es mejor no exponerse al sol debido a que estos tienen el potencial de dañar varias capas de la piel.

3. Olviden broncearse "tirados como garrobos o lagartijas". Si alguna vez fue posible, esos tiempos han terminado. Dado el daño que el sol puede tener en nuestra piel, incluyendo cáncer de piel, es importante no exponerse de esa forma.

4. Si se está realizando algún tratamiento específico para su piel, por ejemplo, despigmentaciones, depilación, tratamientos antiarrugas o antiacné, suspéndalos durante las vacaciones. Exponer la piel a más traumas, como el viento y el sol, puede resultar peor que el remedio. Reinícielos al regreso.

5. La ropa es otra forma de protección, y los sombreros sin duda son excelentes aliados. No siempre podemos estar bajo la sombra, pero el sombrero te protege de estar expuesto demasiadas horas bajo los rayos del sol.

6. Aumente el uso de cremas humectantes en la cara y el resto del cuerpo. Utilice una adecuada para su tipo de piel y así evitar reacciones no deseadas.

7. Tome abundantes líquidos, la hidratación es clave. La piel contiene una importante cantidad de agua, y al encontrarse deficiente, podemos lucir un rostro desvitalizado, piel opaca y envejecida. Hidratarse siempre tiene que estar en nuestra mente, pero en verano más.

8. Use lentes oscuros al exponerse al sol, los ojos son una parte muy importante, e igualmente vulnerables a sufrir quemaduras, ¡así que cuidado!

9. No deje a un lado sus labios, huméctelos y protéjalos constantemente ya que se pueden agrietar y presentar lesiones severas.

10. Y por último, no nos olvidamos de la alimentación y dormir cada día las ocho horas recomendadas, son hábitos básicos para mantener siempre en perfecto estado nuestra piel.

Si desea más información para el cuidado de la piel, puede visitar la página web de Body Balance www.bodybalance.com.sv o llamar a los teléfonos 2263-0101 y 2263-0202.